Consejos para mantener la motivación deportiva
No es necesario dedicarse de forma profesional al deporte para saber que la motivación es uno de los ingredientes clave que, juntamente con la constancia y la disciplina, nos ayudan a lograr nuestros objetivos. Sin embargo, mantener la motivación deportiva no es nada fácil. Podemos tener un mal día o, al no ver progresos, esta desaparece por completo. Sin embargo, no hay que abandonar, sino disfrutar del proceso, con sus más y sus menos. Hoy te explicaremos cómo mantener la motivación en el deporte y no rendirse hasta lograr nuestras metas.
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¿Qué es la motivación deportiva?
Por mucho que entrenemos a menudo o que hayamos empezado una rutina deportiva motivados al máximo, no siempre podemos dar el 100%, tal vez ni siquiera el 50%. Hay muchos factores que influyen en la motivación deportiva, y algunos van más allá de nuestra mente, aspectos que se escapan de nuestro control. Sin embargo, si aprendemos a gestionar las emociones negativas y a buscar la parte positiva de hacer el esfuerzo de entrenar, nos sentiremos muy satisfechos con nosotros mismos.
La motivación deportiva es un factor que nos ayuda a continuar esforzándonos, a ser constante y a no rendirse, aunque nos encontremos con decenas de obstáculos por el camino.
Consejos para estimular la motivación deportiva
Siempre que veamos que nuestra motivación disminuye, podemos poner en práctica los siguientes trucos para mantener la motivación en el deporte y no perder de vista nuestros objetivos.
- Disfrutar del proceso. A veces, no tenemos por qué tener un objetivo concreto, sino que practicamos deporte para cuidar nuestra salud y sentirnos fuertes. La práctica del deporte y la obtención de resultados es un proceso a medio y largo plazo. Si no vemos resultados de un día para otro no pasa nada. La clave es ser constante y practicar un rato de ejercicio cada día a ser posible, aunque solo sea media hora.
- Visualizar la meta. En caso de tener un objetivo concreto, nos ayudará el hecho de visualizarnos a nosotros mismos lográndolo. Sobretodo, márcate objetivos realistas y acorde a tu situación personal.
- Confiar en uno mismo. Muchas personas pierden la motivación deportiva a base de repetirse “no puedo, no puedo, no puedo”. Estas palabras hacen flaco favor a nuestra mente, y nos alejan poco a poco de nuestros objetivos.
- Constancia. Una de las claves del deporte es ser constante con el ejercicio; por lo contrario, los resultados tardarán más en ser visibles. Recuerda que no siempre vas a poder dar el 100% de ti, por lo que si un día tus energías son más bajas o no puedes entrenar, no pasa nada. El descanso también forma parte del progreso.
- Buscar apoyo. En tu círculo cercano puedes encontrar personas que te apoyen e, incluso, te acompañen durante el proceso. Entrenar con compañeros es, a veces, mucho más divertido que entrenar solo.
- Varia la rutina de ejercicios. Hacer los mismos ejercicios durante un largo tiempo no permite mejorar la condición física y, además, nos puede hacer perder la motivación. Cada mes, o cada dos semanas, cambia un poco los ejercicios que hagas en tu rutina de entrenamiento.