Psicoterapia infantil y gestión de las emociones
La psicoterapia infantil sigue, en mayor o menor medida, la misma metodología que cualquier otro tipo de psicoterapia. Sin embargo, como el público al que va dirigido son niños y niñas, el modus operandi debe cambiar para que las sesiones sean eficaces y proporcionen los beneficios que se espera para su salud emocional. Te explicamos en qué consiste y sus beneficios.
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Índice de contenidos
¿Qué es la psicoterapia?
La psicoterapia es un tratamiento psicológico cuyo objetivo se sustenta en la gestión de las emociones, las conductas y los pensamientos. Se imparte por un profesional de la psicología con la formación y las habilidades necesarias para atender a los pacientes.
La psicoterapia hace uso de diversas metodologías de estudio y aplicación, entre ellas:
- Terapia cognitivo-conductual.
- Gestión de habilidades interpersonales.
- Terapia conversacional.
- Habilidades de tolerancia al malestar.
El psicólogo o psicóloga puede utilizar uno o varios métodos en función de las necesidades de cada paciente. En el caso de la psicoterapia infantil, todas las actividades, ejercicios y metodologías a realizar tienen que adaptarse a la edad de cada niño o niña.
Beneficios de la psicoterapia infantil
Los servicios de apoyo psicológico para los más pequeños son esenciales, ya que en los primeros años de vida se producen una serie de cambios físicos, mentales y sociales a los que debemos prestar atención. La infancia, además, es una etapa donde se requiere mucha atención y apoyo tanto por parte de madres y padres, como profesores y profesionales de la salud, en especial, la salud emocional.
A continuación, detallamos una serie de beneficios que la psicoterapia proporciona durante la etapa infantil.
1. Construir la identidad
En la infancia, los niños son muy sensibles a crecer con las etiquetas o los adjetivos que los demás les ponen. Muchas veces, se acostumbran a escuchar palabras degradantes hacia su persona, y crecen creyendo que su valor es menor que el de los demás, sin autoestima. La psicoterapia es una buena herramienta para ayudar a los más pequeños a explorar y construir su identidad sin depender de opiniones ajenas.
2. Ofrecer apoyo y asesoramiento para los padres
La crianza de un hijo no es una tarea sencilla, y la psicoterapia puede ayudar a que los padres o madres de un niño o niña se sientan acompañados durante este proceso. Además, el asesoramiento psicológico es útil para todos los miembros de la familia.
3. Expresar emociones
La psicoterapia infantil ayuda a que los más pequeños aprendan a identificar y expresar sus emociones. Por lo tanto, es una buena forma de ayudarles a desarrollar su inteligencia emocional. Uno de los mayores problemas que las personas arrastran hasta la adultez es que son incapaces de identificar sus emociones y, mucho más importante, aprender a comunicarlas. Achacar este problema desde la infancia nos ayudará a desarrollar la inteligencia emocional y a mejorar la relación con nosotros mismos y con nuestro entorno.
4. Gestionar conflictos
La psicoterapia infantil, además, les prepara para hacer frente a problemas de la vida diaria, así como a gestionar conflictos. Ante un obstáculo, muchas personas se bloquean sin saber qué hacer, colapsan mentalmente y no dejan de tener emociones negativas. Las personas que acudan a psicoterapia pueden tener en sus manos más herramientas para hacer frente y resolver estos conflictos.
Por otro lado, también les ayuda a desarrollar habilidades psicológicas relacionados con la resiliencia, cuyo objetivo se centra en estrategias de afrontamiento y superación del conflicto.
